El gran número de lugares arqueológicos que hay en las islas hace que su historia sea muy diferente de la de otros destinos del Mediterráneo.
Hay monumentos megalíticos, dólmenes de la Edad de Bronce, tumbas púnicas, restos de villas romanas y vestigios de los hombres prehistóricos, que desafían la explicación, tales como los misteriosos surcos de ‘carros'. Durante tres milenios, a partir del año 5200 antes de Cristo aproximadamente, el archipiélago fue el asentamiento de una civilización única constructora de templos. Se cree que los templos de Malta y de Gozo son los edificios independientes más antiguos conocidos por el hombre.
Un lugar especial en Malta que destaca sobre los demás, es el Hipogeo, un laberinto de cámaras subterráneas que se utilizaron probablemente como lugar de enterramiento y como templo. Los templos de las islas están calificados por la UNESCO como sitios Patrimonio de la Humanidad y están abiertos al público. Un buen sitio para empezar su viaje turístico es el Museo Nacional de Arqueología, de La Valetta, o el Hipogeo.