MOSTA

El nombre de este pueblo proviene de la palabra en árabe ‘musta’, que significa centro. Mosta está en el centro de Malta, junto a la Gran Falla que cruza la isla de Este a Oeste. En tiempos medievales era sólo una aldea, pero empezó a crecer a la vuelta del siglo XVII, después del Gran Asedio. Actualmente es un pueblo con una ajetreada actividad comercial. En su centro hay una magnífica iglesia con una cúpula (terminada en 1860), denominada la ‘Mosta Rotunda’, que se cree que es la tercera cúpula de iglesia sin apoyo más grande de Europa. Fue construida, imitando al Panteón de Roma, por el arquitecto maltés George de Vasse. En un bombardeo, durante la Segunda Guerra Mundial, cayó una bomba alemana mientras se celebraba una misa. Perforó la cúpula pero no llegó a explotar. Este acontecimiento está considerado ahora como milagroso. Se puede ver una reproducción de la bomba de 200 kilos en la sacristía. La construcción de esta iglesia fue revolucionaria en su día: la Mosta Rotunda se construyó en el solar que ocupaba la antigua iglesia que fue derribada. El pueblo de Mosta está relacionado con varias leyendas que inspiraron la construcción de pequeñas capillas para la devoción: la cueva-capilla de San Pablo Ermitaño en un pintoresco valle, y la capilla de Nuestra Señora de la Esperanza, construida como acción de gracias después de que una muchacha se salvase de un ataque durante una incursión de los piratas en la isla desde Salina Bay. Dentro de los límites de Mosta hay también restos prehistóricos como las catacumbas debajo del Fuerte de Mosta, y dólmenes de la Edad de Bronce. Mosta también está junto a las Líneas de Victoria, las fortificaciones británicas que se construyeron a lo largo de la Gran Falla.