Vamos a decirlo sin rodeos: la comida y bebida maltesas están entre las mejores del mundo. ¡Es una verdad innegable! ¿Qué mejor forma de sumergirte en la cultura local que degustando su exquisita gastronomía? La cocina maltesa es un verdadero placer para el paladar, un auténtico festival de sabores mediterráneos enriquecido con siglos de historia.

La influencia italiana, especialmente la siciliana, se percibe claramente, pero Malta aporta su toque único gracias a la herencia árabe y norteafricana, fusionada con sus propias tradiciones. Como entrantes, es común disfrutar de sopas, pasta, risottos, entremeses o dips acompañados de panes caseros o picos crujientes. Los platos principales suelen incluir pasta y patatas horneadas, aunque al comer fuera, la carne y el pescado suelen ser los protagonistas.

Desde sus raíces más profundas, la gastronomía maltesa destaca por su pan crujiente, su dorado aceite de oliva, sus quesos excepcionales y su miel dulce y aromática, cuyos secretos se han transmitido a lo largo de siglos. ¡Estos manjares son tan generosos que difícilmente podrás acabarlos de una sola vez! Así que desabrocha el cinturón y prepárate para disfrutar de la auténtica comida maltesa, donde cada día te espera una nueva y deliciosa experiencia.